EXCELENCIA OPERATIVA

«Estamos convencidos de que los colaboradores deben sentirse valorados. Cuando el trabajo tiene sentido y nos sentimos orgullosos de lo que hacemos, somos más felices y más eficaces», explica Frédéric Goncalves, director de Excelencia Operativa y Calidad (Lorette, Francia). De esta forma, el programa Yello se nutre de la visión «Let’s Dare Together» y permite a los colaboradores implementar acciones innovadoras con total autonomía.

«Sabíamos que era necesario que nuestro proceso de calidad evolucionara mediante el enfoque de la excelencia operativa y Frédéric va a ayudarnos a comenzar esta importante modificación», precisa Patrice Métairie, director industrial. El programa Yello acompaña la activación de nuestro mapa estratégico. «Es el momento de utilizar todos los recursos que nos ayudarán a trabajar mejor. El programa Yello es la correa de transmisión y el aceite que faltaban en los engranajes», detalla Patrice. En otras palabras, el programa Yello proporciona un método y unas herramientas para concretizar nuestra nueva orientación estratégica y nuestros valores.

¡Agrupemos nuestras ideas!

Desde el mes de mayo, una treintena de campeones participan en el despliegue del programa Yello, sea en su profesión, sea en una filial o una unidad de producción. Su misión es identificar el saber hacer existente y organizar las propuestas de mejora sugeridas por los colaboradores. Todos pueden hacer sus sugerencias y probar nuevas prácticas susceptibles de mejorar su actividad.

 «Pertenecemos a un grupo internacional, donde la estandarización tiene sus límites. En cambio, si tenemos en cuenta la multiplicidad de ideas, ofrecemos a cada uno la posibilidad de responder a su propia necesidad», explica Frédéric. Y para que todos puedan aprovechar esta dinámica, el programa Yello prevé compartir la experiencia entre las distintas filiales. Por ejemplo, los colaboradores de la zona Europa podrán utilizar directamente una buena práctica desarrollada en la zona Asia-Pacífico o adaptarla en función de la cultura propia de cada filial.

El programa Yello, basado en la confianza y la escucha, refresca el sentido del compromiso individual. «Esto no tiene nada que ver con lo que existe en otras empresas», indica Patrice Métairie. El objetivo es, por supuesto, garantizar la mejora continua, pero, en nuestro caso, la persona es el corazón del programa. Este programa es innovador, ya que se renueva constantemente. No se trata de aplicar un estándar, sino de favorecer la incubación de ideas y crear condiciones favorables para el nacimiento de nuevas iniciativas. Toda la innovación está ahí: encontrar nuevas soluciones a problemas que existen desde hace tiempo». Al final, el programa Yello inspira una nueva energía para que todos trabajen mejor combinando el placer y la eficacia. «Es un proceso innovador que modifica nuestros métodos habituales. Pero el comité ejecutivo está entusiasmado con la idea de implementar el programa Yello, cuyo alcance transversal supera el marco industrial y ayudará a todos los colaboradores», concluye Patrice Métairie.

El programa Yello se integra completamente en nuestro nuevo mapa estratégico.